El museo de la inocencia
Los chinos creían que los objetos tenían alma.
¿Cuántos solemos atesorar algún objeto para recordar a nuestros cariños? Las cartas, el reloj que nunca se quitaba…
Los chinos creían que los objetos tenían alma.
¿Cuántos solemos atesorar algún objeto para recordar a nuestros cariños? Las cartas, el reloj que nunca se quitaba…