CERCAS, Javier. Editorial Planeta (Premio 2019)
Melchor, el policía con un pasado oscuro y apasionado lector, tiene que ser transferido desde Barcelona, después de su hazaña frente a los atentados islamistas que lo convirtió en el héroe de Cambrils. A ciegas y sabiendo que será un cambio transitorio, elige Terra Alta, un pueblo en el que nunca pasa nada, y en donde el silencio le produce insomnio, aunque cuatro años después, en el primer asesinato que le toca investigar, el de los Adell, descubra una brutalidad que nunca antes vio.
Los propietarios de las Gráficas Adell, la mayor empresa del pueblo, han sido asesinados junto con la criada rumana. Melchor revisa el sitio como parte del equipo de investigación, y perturbado por lo que observa, no logra despojarse del aroma de euforia que percibe en el ambiente.
En Terra Alta, Melchor ha encontrado a Olga, quien le ha llevado a percibir su estancia como la mejor etapa de la vida. Con Olga tienen a Cosette, la hija cuyo nombre honra a Los Miserables, el mapa de Melchor.
Con un lenguaje cercano y un ritmo que mantiene la tensión, la novela corre por dos orillas: el asesinato en Terra Alta y la historia del protagonista, que se hilvanan a través de la novela del siglo XIX. Y en el transcurso, menciones del independentismo catalán, el atentado terrorista del 2017 en Barcelona, y el asesinato en proceso de investigación, que dan contexto a las violencias que hoy vivimos.
Una novela de suspenso que alcanza otro relieve con el acierto de sumar a Los Miserables en la historia, lo que la hará volar. Las reflexiones de Melchor sobre Jean Valjean y Javert acercan al lector a preguntarse sobre la ley y la justicia; cómo se relacionan, cómo interactúan, cuáles son las fronteras de una y otra. Un tema que se nos encima en el país y en el mundo que hoy vivimos, en el que la impunidad crece sin pudor.
Personajes singulares dan cuerpo a la historia como el abogado Vivales, con cara de pedrada y cuerpo de camionero, que me recuerda lo que leí en algún lugar que ahora no me acuerdo, sobre el gusto del autor por escribir literatura que no parezca literatura. Y otros, como el protagonista y Olga, a quienes acompañamos en su transformación.
La novela no sólo me deja decidida a leer Los miserables, que en la Colección de Sepan Cuantos que reposa en mi librero, cuenta con 919 páginas, sino que la cierro con el deseo de leer más del autor. Esa pluma que va dejando reflexiones al vuelo, como el pueblo en el que nunca pasa nada, y en el que sucede todo; una provocación para pensar sobre la importancia de la percepción en la narración de nuestras realidades.
Georgina GM
Febrero 2022
